Seguro te pasa.
Cuando escuchas las siglas LSSI-CE (Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico) y te dicen que es de OBLIGADO cumplimiento, te ocurren dos cosas:
- Empiezas a bostezar
- Piensas que es un rollo legal absurdo
Pasa siempre que se habla de leyes o regulaciones y cuando nadie se molesta en explicarnos en cristiano de que va esto y como afecta a tu negocio. Si encima nos dicen que es obligatorio y que si no cumplimos nos crujen, más antipatía y menos ganas de saber si nos puede servir para algo.
¿De qué va la LSSI-CE?
Aunque no entiendas que significa la LSSI-CE, seguro que eres consciente de las transformaciones que han propiciado los nuevos entornos digitales. La sociedad de la información determina nuevas maneras de relacionarnos con las marcas y eso abre la puerta a nuevas posibilidades y nuevos riesgos.
¿Comprarías en una tienda escondida en un callejón oscuro con un vendedor que lleva un pasamontañas?
Dependiendo de lo que pretendas comprar, lo normal es que no entres.
Lo mismo ocurre en los entornos on line y con mucha más razón.
Por eso existe la LSSI-CE, respondiendo a la necesidad crear entornos confiables. También de la urgencia de regular derechos y obligaciones y además:
- Incentivar el comercio online y dar seguridad en la compra.
- Garantizar sus derechos de usuarios respecto a su privacidad.
- Evitar fraudes, usurpaciones de identidad, publicidad desleal.
- Luchar contra prácticas nocivas como el SPAM y utilización desleal de datos personales.
¿Para qué sirve la LSSI-CE?
Para hacer que la economía digital crezca y no se socave la confianza de los usuarios, algo fundamental para el desarrollo de los negocios on-line.
Si no hay garantías legales, si los responsables de las páginas pueden usar la información que recaban como les venga en gana …
¿Quién sería el valiente o el incauto que operara comercialmente por internet?
¿Cuántos suscriptores tendrías si los derechos de estos no estuvieran garantizados y cualquiera pudiera hacer lo que quisiera con los datos personales de los demás?
¿Cuántos harían transacciones comerciales electrónicas si no tienen ninguna garantía legal?
¿Qué pasaría si no estuviera penalizado el Spam y la publicidad desleal?
LSSI = Marketing inteligente: conoce sus reglas
Ahora viene lo interesante y lo paradójico.
Resulta que adecuarse a las prescripciones de la LSSI-CE es la mejor forma de hacer un marketing inteligente.
¿Cómo te has quedado?
Te lo explico antes de que sueltes el ¡venga ya!
Regla #1: Los usuarios para comprar, antes necesitan conocerte
La LSSI propone como norma básica la transparencia y la información.
El usuario debe saber quién está detrás de un portal, que van a hacer con sus datos, como perderte de vista si lo aburres o lo irritas, etc.
La trasparencia y la información son la mejor manera de generar confianza y credibilidad.
Algo básico para vender, de primero de marketing vamos.
Por esto, cuando escucho a profesionales del marketing decir que la LSSI es un rollo, que no necesitan de esas leyes, que solo son un obstáculo a su creatividad, sé, que nadie les explicó esto, nadie reniega conscientemente de aquello que garantiza su sostenibilidad profesional.
Adecuarse a la LSSI significa transmitirles a tus usuarios, clientes, suscriptores, etc. la certeza de que eres un profesional confiable y que haces un uso ético y responsable de su información. Si esto no te parece marketiniano, ya me contarás.
Regla #2 No interrumpas, pide permiso
La LSSI prohíbe las comunicaciones comerciales que no hayan sido previamente solicitadas o expresamente autorizadas.
¿Esto qué significa?
Que debes pedir permiso antes de dirigirte comercialmente a alguien.
El requerir el consentimiento es puro marketing de permiso, algo que todo profesional del marketing conoce bien y sabe de sobra que es lo más efectivo.
¿Qué correos elijes leer nada más abrir tu buzón de entrada? Los de conocidos y en especial, los que sepas que no intentan venderte nada.
Una campaña de mail marketing necesita de ese permiso para ser eficaz. Aprender a captar registros legalmente es la mejor estrategia de mail marketing. Palabrita.
Nuevamente, la LSSI vuelve a comulgar con un principio básico del marketing “no intentes vender si no te conocen y no te han dado su permiso para contactar con ellos”
Es del todo ineficaz e inútil.
Regla #3 Trabaja tu engagement siendo respetuoso
¿Cuál es tu reacción cuando alguien que no soportas insiste en mandarte correos después de pedirle que te diera de baja?
¿Qué ocurre cuando alguien utiliza una imagen en la que apareces para promocionarse sin consultarte?
¿Cómo te sientes cuando una empresa que no conoces te manda una promoción a tu WhatsApp?
¿Y qué pasa cuando eres tu quien incurre en esas prácticas?
La LSSI regula todas y cada una de las prácticas que arremeten contra la voluntad del usuario, como las citadas, entre otras y marca las reglas de juego.
Estar bajo el amparo de esta regulación, hará que juegues limpio, que no hagas un marketing intrusivo, que mejores sustancialmente tu engagement gracias a tus buenas prácticas.
En definitiva, que practiques el marketing que funciona, el marketing inteligente y respetuoso.
Para eso, deberás dejar evidencias claras en tu web y en tu forma de gestionar la información que capturas en tu web.
¿Cómo?
- Con un aviso legal realista, nítido y comprensible.
- Con una política de privacidad acorde a la gestión de los datos que realizas.
- Advirtiendo de las cookies que descarga tu web y requiriendo el consentimiento antes de descargarlas.
- Con un sistema de validación de usuarios doble opt-in, que asegure la voluntad del usuario.
- Permitiendo la baja automática y ágil de cualquier persona, haciendo valer su derecho a cancelar sus datos.
- Y si vendes servicios en línea, respetando las nuevas condiciones de una venta legal.