Una de las prácticas y funciones más usadas en Twitter pero menos reconocidas en público. Hoy vamos a hablar de la famosa opción de SILENCIAR a un usuario, muy socorrida para multitud de usuarios de Twitter que no quieren tener su timeline inundado de contenidos, tuits y enlaces que no le interesan; pero entonces… ¿Por qué no hacer unfollow?
Silenciar en Twitter, que viene a ser como el primo chungo de la opción de Facebook de ‘dejar de recibir notificaciones’; no terminas con la amistad virtual de la persona condenada y la red te sigue avisando de sus cumpleaños, para que puedas seguir quedando como un usuario protocolario.
Pongámonos en situación; no eres ningún usuario estrella, ni un influencer, ni una cuenta corporativa. Eres un usuario más de esta enorme red de intercambio de enlaces, puyas graciosas, gifs de gatitos y de información (sobre todo información) Es decir, no buscas ni pretendes que Twitter sea para ti más que lo que es: un lugar fantástico donde compartir excelentes momentos (de asueto y/o profesionales) Y como tal sigues (o dejas de seguir) a muchas cuentas. Algunas serán de personas cercanas, otros de conocidos, otras serán marcas, de empresa etc y entre todas estas siempre habrá usuarios que sigues porque conoces a alguien que les sigue o porque una vez te hizo gracia o interesó una actividad concreta de su timeline. Y ese usuario te devolvió el follow (que recordemos, NO es obligatorio)
Y un día tu timeline empieza a sufrir alguna de estas situaciones:
- Floodeo: al usuario en cuestión le da por inundar TW con la última ocurrencia que ha tenido o con un brote de escritura nerviosa (a veces acompañada del uso de mayúsculas) sobre un tema concreto.
- Info no relevante o molesta (para ti): comienza a publicar materiales que no te interesan para nada o que chocan con tus ideas y principios.
- Info solo personal: convierte tu timeline en un muro de las lamentaciones o de la exaltación sobre su vida, obra y milagros.
En definitiva, has abierto Twitter en el momento que ese usuario está dando el uso que prefiere a su cuenta personal y a ti te está quemando que masifique tu feed de información entre tus amigos, conocidos, prensa etc con la manera en la que él o ella enfoca su perfil.
Y recurres al socorrido botón de silenciar usuario. Respiras aliviado. ¿No? ¿Y por qué, si puedes hacer unfollow y nadie va a ir a la puerta de tu casa a pasarte la factura?
Hay muchas opciones de Twitter para gestionar nuestra lista de cuentas que seguimos y disfrutar de una buena experiencia de usuario (empezando por seleccionar bien a quien seguimos o dejamos de seguir) y puedes crear listas con las que administrar tus contactos, entre amigos, profesionales o por temática (y además, como muchos hacen, recurren a ellas para no hacer follow de primeras)
¿Temes la repercusión ‘social’ en esa red social por dejar de seguir a alguien ‘que sí te sigue a ti’? ¿Tienes miedo de hacer unfollow en esos casos? ¿O temes perder un seguidor tras tu acción? ¿O tal vez no te apetezca que si te cruzas con esa persona un día te comente la jugada? ¿O directamente piensas que le puedes crear malestar si dejas de seguirle?
Son muchos “tal vez” y “posibles” ¿no crees?
Desde el punto de vista práctico, esta opción es la más cómoda para evitar(te) problemas de malos entendidos o conversaciones poco agradables (en el caso de que sucediesen) aunque no deja de ser curiosa la forma y maneras en las que se recurre a ella.
¿Al final Twitter muestra tal y como somos incluso en entornos virtuales al jugar a ‘tratar de quedar bien’ hasta las últimas consecuencias?
¿No piensas que un unfollow es algo mucho más sincero y sano que la socorrida acción de muteo? Como vengo comentando en varios artículos dedicados a las redes sociales, cada red es un mundo y cada usuario un universo (aunque con patrones reconocibles en ambos casos)
Si has recurrido a esta opción ¿te apetece comentarnos lo motivos o decisión que te llevó a ello? Si no eres partidario de ella y eres de unfollow castigador ¿te animas a dar tus argumentos en los comentarios?